Kabul Disco: Cómo no me secuestraron en Afganistán

En la primera página ya me vi reflejada, sabía que me iba a gustar, a pesar de que por el aspecto de su portada y de sus tapas blandas no hubiera puesto muchas expectativas en él. Me equivocaba.

Nicolas estaba buscando trabajo. Es dibujante y buscaba cualquier oferta con tal de trabajar de lo suyo. No importaba donde, también tenía que dejar el piso, así que aprovechaba su mudanza para cambiar de aires. Un anuncio en el que buscaban dibujantes en Kabul para hacer un cómic sobre la Constitución en Afganistán le pareció buena idea, lo que él no sospechaba es que le acabarían contratando. A pesar de ser un trabajo temporal y de que sus primeras impresiones no fueron lo que él hubiera esperado, en cada página, cada situación y a medida que avanza su trabajo percibimos como se va acomodando a una ciudad que, si bien no llama la atención a nadie, hasta nos dan ganas de hacer las maletas e irnos con él.

A través de sus dibujos, donde él mismo también sale representado, Nicolas Wild nos muestra su día a día en Kabul, su oficina, compañeros, sus dibujos afganos, sus dificultades para comprar tabaco y las situaciones a las que tiene que exponerse, a pesar de que la guerra haya terminado poco antes de su llegada. Quizá podamos encontrar ciertas similitudes con el Pyongyang de Guy Delisle, ya que nos abre una ventana a una ciudad prácticamente desconocida para los occidentales (al menos fuera de las imágenes bélicas) con una gran dosis de humor e inocencia. Una de las diferencias entre ambos es que, si Delisle era capaz de sacarnos una sonrisa, Wild nos produce una enorme carcajada. A pesar de la inverosimilitud de algunas situaciones, como los secuestros (ahora no estoy muy segura si fue en el 1 o en el tomo 2) sus vivencias son como las que podríamos haber obtenido allí cualquiera de nosotros que se haya atrevido a vivirlas. Y esa cercanía y sencillez es lo que nos mete de lleno en sus viñetas sin permitirnos soltar el libro hasta haberlo acabado. Sí, es altamente adictivo.

Aunque de la ciudad en sí apenas podremos ver nada, ya que los expatriados allí deben de moverse por las zonas más seguras de la capital, sí que nos pone en situaciones de riesgo y nos muestra las costumbres de un país que, a través de sus ojos, es fascinante. Lo mejor de este cómic es que, además de conocer algunas partes de Kabul y algunos pueblos de los alrededores a través de las viñetas, al final del volumen incluye algunas imágenes del propio autor caracterizado y del entorno que le ha acompañado durante todo este tiempo. Un final que trae como regalo el ponerles cara a todos los protagonistas porque, cada fiesta de despedida, cada vez que alguno de ellos decide abandonar, el lector, tan metido como ellos en aquel grupo de trabajo, también siente su pérdida.

Mi valoración personal es de un díez, ya que desde su comienzo es imposible parar de leerlo y, una vez terminado, ya estás deseando hacerte con su segundo tomo Kabul Disco 2: Cómo no me enganché al opio en Afganistán. Otra delicia para pasar un buen rato cargadito de acción.

Como curiosidad, en Afganistán la portada del libro la encontraron algo ofensiva, por lo que la han modificado antes de ser publicado en los países árabes. Consideran que bailar con una mujer de esa manera es dejarla como una «prostituta» y bailar encima de un tanque «»peligroso». Aquí os dejo las imágenes que el mismo autor publicó en Le Monde.

 

Sobre Nicolas Wild

Nicolas Wild es un dibujante francés, de Alsacia, que decide irse a vivir a Kabul, Afganistán, para trabajar como dibujante de la nueva Constitución del país. A raíz de esa experiencia decide publicar sus aventuras en esta capital: kabul Disco, Cómo no fui secuestrado en Afganistán y Kabul Disco 2, Cómo no me enganché al opio en Afganistán. Actualmente también es blogger en el periódico francés Le Monde, donde habla sobre sus obras y algunos otros cómics de su interés. Según un artículo suyo escrito en este periódico, puede que en 2013 tengamos la tercera parte de kabul Disco.

Periodista digital especializada en viajes

2 Comments

  1. Hola,

    Este cómic me moló muchísimo, ¿conoces alguno más del estilo? Que no sea el siguiente, que creo que de este autor me los he leído todos

    Gracias

  2. Hola Carlos,

    ¿Has leído los de Guy Delisle? Es el autor que más puede asemejarse. Asimismo, me acabo de enterar de que Nicholas Wild ha lanzado un nuevo título 🙂 «Así calló Zaratustra». Estoy deseando leerlo.

    Un abrazo

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