Bebelplatz y la quema de libros, Berlín

Bebelplatz, quema de libros en Berlín


Bebelplatz es una de las plazas más sobrias de Berlín. Está completamente desnuda. Es como un solar abandonado de no ser por la cantidad de turistas que recorren sus adoquines con la cámara de fotos.

Todos enfocan hacia el suelo, más concretamente a una pequeña claraboya cuadrada por la que prácticamente no se puede ver nada. El cristal está demasiado desgastado.

Librería vacía de Bebelplatz

Unos pasos más adelante, también en el suelo, podemos leer la inscripción en alemán: Das war ein Vorspiel nur, dort wo man Bücher verbrennt, verbrennt man am Ende auch Menschen (Eso sólo fue un preludio, ahí en donde se queman libros, se terminan quemando también personas). Una frase del poeta alemán Heinrich Heine que describe lo que la plaza de Bebelplatz sufriría el 10 de mayo de 1933.

quema de libros de Bebelplatz

Se quemaron más de 40.000 libros

Los nazis obtuvieron más de 40.000 libros de las bibliotecas alemanas para arrojarlos a la hoguera que prendieron en Bebelplatz. Informes científicos, poemas, novelas, reflexiones filosóficas… Y otros títulos considerados por el ministerio de propaganda de Goebbels como «subversivos».

Obras de Brecht, Mann, Marx y otros ilustres artistas fueron reducidas a cenizas. Y, los propios autores, pasaron a encadenar la lista negra de los nazis. Aquella quema de libros sólo fue el principio de la caza y expulsión de los intelectuales alemanes, tal y como auguraba Heine unos años antes.

Se dice que unos 24 premios Nobel de Alemania y Austria se vieron obligados a emigrar hacia Estados Unidos.

Bebelplatz

La desolada plaza, situada en una de los laterales de Unter den Linden, es uno de los lugares más visitados por los turistas. Todos quieren acercarse hasta la claraboya para intentar ver el lugar donde se realizó la quema de libros y la Empty Library (la biblioteca vacía), una obra de Michael Ullman.

Rodeando la plaza están la Universidad Humboldt, la catedral de Santa Eduvigis (que es la iglesia católica más antigua de Berlín) y la ópera más importante de la ciudad, Staatsoper Unter den Linden.

Periodista digital especializada en viajes

3 Comments

  1. He ido a Berlín unas tres veces y, aunque he pasado por delante de la plaza, no sabía la historia. No me sorprende, los nazis acabaron con todo; aunque ahora me gustaría volver para fijarme más en ella.

  2. Hola Carlos,

    Sí, yo tampoco la conocía, había un grupo con un guía en ella y me quedé al lado escuchando, me pareció de lo más interesante. Berlín me encanta 🙂

    Gracias por tu comentario.

    Un saludo!

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